DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS.

Hoy es un día muy especial
Todos quieren celebrar
Se oye la música, todos quieren bailar,
La comida ya esta lista
A comer pavo, a comer jamón,
Pero muchos se olvidan
De darle gracias a Dios.

Con el vino y la cerveza
muchos van a brindar
mucha alegría, en la mesa todos están,
celebrando este día tan especial,
mientras otros en sus casas
solo un pedazo de pan.

El pavo, que sabroso está
¿y donde están las gracias
que a Dios le tienen que dar?
¿por esa comida que vamos a disfrutar?

Día de acción de gracias
Es un nombre que de la boca
de todos se suele escuchar,
ya es hora de celebrar,
porque aquí se comerán
esos alimentos que ricos están,
un manjar muy especial,
y que en todo el año los tuvimos por demás,
mientras otros murieron de necesidad,
sufriendo de frío, sin nada que
que le diera paz, que le diera alivio,
¡que triste ver hambre en este solitario mundo!


¡Vamos a cantar en coro
la cena servida está!
son tantas las fiestas para celebrar,
y hoy día de acción de gracias
¿quién se ha puesto a pensar?
que todo lo que tenemos
son bendiciones de Dios,
mientras en nuestra mesa no le cabe
un plato más, seguro que algún vecino
se acostara sin cenar.

Dime tú, ¿le diste gracias a Dios?
Y tú, antes de comer, ¿pensaste en
aquel tu prójimo, que nada tiene
que saborear? Y si no fue así,
entonces ¿que es lo que celebras?
¿el día de acción de gracias?
¿dónde esta la acción,
donde están las gracias?
piensa primero en Dios
y a él dale las gracias, con una oración sana,
para que puedas comer sin sentir
que el corazón se te desgarra,
porque tú tienes por demás, pero a otros
el alimento siempre le falta.

¡Feliz día de acción de gracias!
mi familia me espera, mis amigos en mi casa,
lo que adorna mi mesa
son de Dios sus mejores dones,
disfruto del pan de cada día,
y quiero compartir con otros
mis pocas penas, mi gran alegría,
y le ruego al señor con lágrimas de ternura,
que a nadie le falte la bendición
de comer todos los días,
aunque sea un pedazo de pan
con agua fría,
que no se acuesten llorando,
que siempre todos sonrían
gracias señor por estos alimentos
que me regalas día por día,
y a toda la humanidad
que siempre Dios los bendiga.




Autora: Carmen Lydia Rosa.
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